A ustedes,

Que descargan películas y seriales de la red internáutica
Que cada vez que pisan una tienda de discos (siempre acompañando a alguien) se sorprenden de que aún existan lineales repletos de cedés musicales
Que ha tiempo renegaron del papel para acabar leyendo sus libros o tebeos en formato digital, portátil y molón o no
Que cada vez que visitan un principado cercano se agencian con una cantidad ingente de deuvedés y cedés vírgenes para sus correrías, por aquello de no pagar ni IVA ni cánon digital,
Que acuden a un concierto como acto benéfico por el tópico de que "los artistas donde ganan dinero es en el directo y no con las ventas de cedés" y no por el disfrute del momento
Que siempre que van a casa de un allegado van cargados con su pendrive/memory stick o su disco duro portátil como si de Papá Noeles atemporales se trataran (o tratasen)

A todos ustedes me dirijo:

¡Dejen de hacer leña del árbol caído! ¡Dejen de jactarse desde sus sótanos (o cuartuchos llenos de pósters y muñecos) de la desgracia ajena! ¡Tiendan, aunque sea por una vez, a aquella máxima cristiana de perdonar al prójimo!

Y es que el pobre Teddy Bautista, a fin de cuentas, ha hecho lo que ha hecho por poder seguir adquiriendo ARTE original, consiguiendo así que los ARTISTAS de éste, nuestro bien amado país, puedan seguir viviendo de su CREATIVIDAD, que ya que ustedes no pagan cánon digital (o al menos lo intentan las más de las veces), siempre ha habido, entre todo este asqueroso desierto de supuestas ilegalidades, un hombre que ha sido capaz de arriesgarlo y darlo todo por los AUTORES.

No sean tan duros, pues. El nunca lo haría. O sí.

Ea.