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lunes, septiembre 24, 2007
11:10 p. m.

Con los concursos nocturnos hemos topado

rubricado por Higronauta
He de confesarles algo: un servidor sufre de una irremediable filia obsesiva para con los programas nocturnos cacharreros. Todo empezó un día que, paseándome por las emisoras sintonizadas, encontré en una cadena localista un concurso de adivinar parejas (aka Memory). Y aunque el panel era horrebundo y los concursantes alelantes lo que me llamó la atención fue la señorita que lo presentaba, y no por su figura, como los mentecalenturrientos habrán pensado, si no por su facilidad de palabra ante la nada más absoluta. Estaban ella, el panel de juego y la cámara. Nadie ni nada más. Y aún así, aquella joven era capaz de elucubrar y monologuear deliciosamente sobre cualquier tema que le pasara por la testa, con la única finalidad de hacer tiempo hasta la siguiente llamada. Lo reconozco: me volví un adicto empedernido.

No todo va a ser follar

Pasó el tiempo y aquella dicharachera joven emigró a otro ámbito laboral (espero más digno) y el que esto escribe se encontró perdido. Hasta que me topé con dos innombrables elementos que, cual si de un programa de radio se tratara, se encargaban de soltar las barbaridades más deleitantes y ordinarias ante la cámara y ante cualquiera que osara llamar (que aquí, no eran pocos). Rizaban el rizo al transferir lo radiofónico a lo catódico, porque poder contemplar la gestualización y la emotividad con que enarraban presupuestas proezas, cortaban llamadas a placer o mostraban imágenes de supuestas femmes medioemboladas, otorgaba al panorama catódico una dimensión añadida.

Presentadora ebria

Y llegó la televisión digital terrestre (TDT, como el mítico insecticida). Y ni cortos ni perezosos, viendo las posibilidades que ofrecían este tipo de programas abrieron la veda. Programas de bajo presupuesto, donde, con un incentivo económico irrisorio, el público realiza sus llamadas pagando (el precio mínimo suele rondar el euro y poco por minuto/llamada) y donde únicamente hay que poner en nómina a cuatro técnicos y a uno o a lo más dos presentadores. De ahí que desde Telecinco (por partida doble en sus dos canales digitales, en según que franja horaria) hasta la Sexta hallan apostado por este formato.

La palabra a buscar es POTA

Y un servidor difrutando como un enano. Porque, a fin de cuentas, estos concursetes no vienen a ser más que una versión televisiva (o televisada) de las casetas de feria que uno siempre ha admirado tanto. El tipo de concursos se asemeja ilimitado: una sopa de letras insultante por su facilidad (ni diagonales ni verticales ni palabras invertidas), los clásicos juegos de lógica de mover palillos, el ahorcado, contar el número de triángulos de una figura, buscar palabras entre unas letras dadas, etc. Pero dos son los aspectos que más encandilan, fascinan y adora el que esto escribe:

Teleconcurso comentado en Arucitys

1. Como ya he comentado, sus presentadores. Entes venidos de la nada que aspiran a hacerse un futuro catódico utilizando estos programas como trampolín y que nada tienen que envidiar a los presentadores de programas más generalistas y audicionados. Porque porque no cuentan con guiones previos ni regidores que les soplen sus monólogos mediante pinganillo alguno. Porque por ese hecho, han de enfrentarse al horror vacui que provoca estar ante un número indeterminado de espectadores, y encima animarlos a llamar para así aumentar arcas de programa. Porque son capaces de soportar a lo peor de nuestra sociedad, que llama desde la ignorancia supina para conseguir unos míseros euros. Porque, cuando no saben ya cómo seguir dando el tipo, son capaces de sacarse de la manga los más delirantes temas que alargan y alargan durante horas (no exagero, un servidor ha visionado presentadoras que han estado aguantando on their owns durante hora y cuarto que alguien llamara). Porque algunas de sus presentadoras parecen estar más en una línea erótico-festiva que en un programa catódico. Porque, a veces, provocan en el espectador unas tremebundas ganas de arrearles una hostia descargando y sublimando así pulsiones de thanatos. Porque...

Humor se escribe con H

2. Los concursantes. Glorioso país este que gesta y forma a personas que son capaces de confundir países con ciudades, ciudades con mares y mares con continentes. Que son capaces de demostrar su nivel de erratas ortográficas en pleno programa nacional. Que no tienen tapujos en hacer valer su falta de atención al repetir la misma respuesta errónea del concursante anterior. Que hace que, a fin de cuentas, concursos con un nivel harto irrisorio (por no decir subnormal) se tornen molinos de viento contra nuestros quijotescos participantes. Santiago y cierra España.

Cuarto Milenio, versión teleconcurso

De acuerdo que el visionado de estos programas puede resultar tedioso en ciertas ocasiones, no se lo niego. Hay que saber navegar entre todos los que nos ofrece la parrilla nocturna siempre buscando la genialidad. Porque les aseguro que, noche sí, noche también esta aparece en cualquiera de sus múltiples formas. Y eso, no se a ustedes, pero a un servidor, en horas de vigilia, ya vale su peso en oro. O sea.

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14 Réplicas:

Yo en mis noches de insomnio me enganché a un programa de llamadas telefónicas de la audiencia en la que tenían que adivinar cosas estúpidas. Era muy tarde, de madrugada, así que las llamadas escaseaban: El presentador se encargaba de mantener la conversación viva durante las 2 horitas que duraba. Le juro que aquello era un espectáculo lamentable: Un cocainomano con aspiraciones de John Wayne hablando compulsivamente. A mí me fascinaba la cantidad de mierda que era capaz de decir, me quedaba clavada inverosimil delante de la tele, atónita.

  At 25/9/07 10:20 Blogger Higronauta afirmó:

Consuela saber que no soy el único que sufre esta fília mesmérica por los mencionados programas. Y es que la mesmérica grandeza patética que pueden alcanzar los hace irresistibles para los hijos de la noche.

  At 25/9/07 10:27 Blogger Aura afirmó:

Y yo que ignoraba este tipo de shows... ¿Sabe lo que está haciendo? Me está incentivando a dejarme "los dineros" llamando a estos genios del espectáculo.
A mi estos me dejan un poco fría, los que realmente me gustan son los teletiendas (sigo embobada con las posibilidades de la baba de caracol) y los de mensajes de texto en las locales, llenos de drogatas con las parafilias más extrañas que haya visto.

  At 25/9/07 18:21 Blogger Marta afirmó:

Pero pero pero... esa tía iba pedo de verdad???

Aunque la teoría generalmente aceptada es que el ser humano desciende del mono, en mi caso hubo un eslabón híbrido de por medio y algo de marmota llevo en los genes... pocas cosas me quitan el sueño.

En cualquier caso cuando así ha sido, me he decantado por comer y encender el pc...
Maese Higro, con estas recomendaciones no va a conseguir su excelencia que me dé por encender la tele de nuevo y de mutuo propio después de tres larguísimos años...
y aunque he sido hijo de la noche mientras mi mente lo permitió, nunca me dio por la tele; quizá debería consultar el porqué de mi aversión, teniendo en cuenta que tengo acceso a más de un millar de cadenas...y muchas pantallitas de esas...todo esto es muy misterioso. ..cuando tengo "insomnio" me voy a jugar al billar...

  At 26/9/07 09:47 Blogger Higronauta afirmó:

No se confunda aura, la grandeza de estos concursos radica en su visionado, no en su participación, convirtiéndose así en un instrumento más de la orquesta. O, si quiere llamar llame, pero no utilice a un servidor como excusa :P

Estrellita, cuando las teletiendas eran producto patrio, si que tenían su aquel, pero una vez fueron digeridas por las importaciones yankis, para un servidor el asunto perdió adicción. Eso sí, los de mensajes de texto locales y los de clubs de ligue son también harto impagables. Ronda por mi testa dedicarles también unas líneas.

Yedra eso parece, eso parece... Y es que opino que hay que estar muy borracho o tener muy poca estima para presentar un concurso de estos. Si sumamos las dos cosas, la combinación se torna perfecta, entonces.

Pasé por su estado, maese loco, pero me he "reformado" y ahora sólo visiono lo que realmente me interesa (que sigue siendo más bien poco).

  At 26/9/07 12:21 Anonymous Anónimo afirmó:

El lujo de verdad, estoy con Estrellita Mutante, está en las teletiendas. Sigue habiendo teletienda carpetovetona, en Tienda en Veo tv(canal tdtdero) hay teletienda en falso directo y en español protagonizada por una serie de personajes, cada cual mas hórrido que el anterior, anuncian productos yankies, albioneses, o germanos.
Pero atentos, no los anuncian sujetos cualquiera, un bigardo español con pinta de carnicero, un joven de las juventudes del pp con aficiones oscuramente relacionadas con Ralph Lauren, dos Francoparlantes que hablan algo anteriormente conocido como español y unas estupendas señoras bulímicas y adictas a los barbitúricos que anuncian edredones y colchones de latex y que están coninuamente masturbando tanto al colchón como al edredón....
ahi queda.

  At 26/9/07 12:59 Blogger Higronauta afirmó:

Ando tan enfrascado con los teleconcursos telefónicos que no había dado con esos teletiendas cañís y harto apetitosos que comenta, maese angalqua. Ya tengo ganas de tener un ataque de insominio únicamente para poder visionarlos, con un buen bol de palomitas en ristre.
Los tletiendas tiene que tener droga entremetida en algún frame que te tiene enganchado viendo como el chino corta de forma alucinante con los cuchillos gingsu, o como hace comidas en un periquete el chef 2000.
En cuanto a lo del bajo presupuesto es tal que de los cuatro técnicos de los que hablas creo que has exagerado hasta el doble.

  At 26/9/07 15:36 Anonymous Anónimo afirmó:

Lo del vomito en vivo y en directo me ha dejado anonadado.
Es tan irreal que parece un sketch.

  At 26/9/07 19:42 Blogger Higronauta afirmó:

Usted no sé, maese busano pero un servidor tiende a creer que el visionado de los cuchillos asiáticos es motivado por la posibilidad de ver cortes y tajos, como ocurrió en un delicioso capítulo de Tan Muertos como Yo.

Dr. Zito lo mismo me pasó a mi. Ver para creer. Y para emitir, que es lo peor del directo.

  At 26/9/07 20:23 Blogger kuroi yume afirmó:

Sí, siento dejar de lado su exhaustivo y acurado análisis, pero es que ese video acaba de marcar mi vida para siempre!

  At 9/10/07 19:31 Blogger vtwin0001 afirmó:

Esa conductora ebria, realmente deberia de decir: "Si alguien llama, me quito una prenda" quiza de esta forma logre mas llamadas! jajajaja

Saludos maese Higro.. llevo desaparecido mucho.. pero aun sigo vivo ;-)