"Hablaba con los ratones, la pobre muñeca fea"
Enrique y Ana

Alejado del mundanal ruido como ando últimamente, no había tenido noticia alguna, hasta día de hoy, de la muñeca que ha creado la empresa Dolls by Berenguer S.A. (muy inglés el nombre, pero viene a pertenecer a un alicantino de nombre José Berenguer) a imagen y semejanza de la futurible reina celtibérica, doña Leonor. Y cual no ha sido mi asombro al enterarme que esta limited edition (8000 muñecas) de la princesita se había agotado de todas las tiendas peninsulares en tiempo record. Ver para creer.

Lo curioso del tema, es que no había intención alguna en crear esta muñequita, si no que en el proceso de renovación del catálogo de la citada empresa, una vez salieron los primeros prototipos de las nuevas gamas, alguien parece ser que apuntó al parecido de uno de los amasijos de plástico con la infanta (que digo yo, ¿quién deminios es capaz de acordarse de la faz del bebote real a bote pronto?). Dicho y hecho: España es asín, y una oportunidad como ésta, era harto imperdible, tal como andan los tiempos (monárquicos).

'No queremos que nuestra muñeca acabe comercializándose en lugares donde no queremos o en sitios donde 'Leonor' pueda perder la categoría de magnífica y excepcional muñeca' afirmó el gerente de la empresa. Y un servidor se pregunta, ¿qué lugares son esos? ¿Tiendas de juguetes, quizás? ¿Grandiosísimas superfícies? Muñeca con clase, alcurnia y pedigrí, vamos. Y a 65 euros la pieza. Eso sí, los alemanes ya nos han ganado terreno, puesto que un particular de esas tierras, ha customizado su pieza, ofreciéndole "cuerpo de tela relleno de fibra suave. Equilibrado para que Leonor tenga el peso, la textura y la apariencia de un bebé real". Por si les interesa, en Ebay ya están subastándola y por el momento, su precio ronda ya los 150 euritos. Ahí es nada.

Y como no podía resistirme, y utilizando la consabida excusa de la ampliación de datos y el rigor de estos, he entrado en la página internáutica del señor Berenguer, y me he recorrido el catálogo de muñecajos que tienen en su haber. Impagable oigan. Les comento alguno de ellos, por si quieren coger ideas de cara a estas fechas navideñas que ya están aquí delante:

Buty's: El negro (o, en lenguaje PC, el niño negrito)

Curiosamente, es el que menos aspecto de bebote tiene de todo el catálogo y se asemeja más a la tradicional muñeca. Eso sí, qué bien queda delante de las amistades regalar este juguete. Uno se torna solidario y comprometido ipso facto. La pregunta es: ¿qué atuendo porta en la testa? Y, ¿por qué va desvestido de cuello para abajo? ¿Referencias culturales de los constructores quizás, extraídas del Florido Pensil? Qui lo sa...

Nena Mia: La rechoncha

Porque ahora que la sociedad anda tan comprometida con el tema de la obesidad y controles hamburguesiles varios, ya pueden disponer de la muñeca sin complejos. Esto es postmodernidad y lo demás son tonterías.

Choly's: O la hermana de Chucky.

De comunión. Y con una cara abuelítica que espanta. Aunque, no les engañaré, lo que más divierte a un servidor es el nombrecito de marras, que le da a pensar que, quizás, es un prototipo de chola de esas a los que andamos tan acostumbrados en según que urbes hispánicas.

Pocholy's


Sin duda mi preferido. Y ya no por el nombrecito con el que le han bautizado (y ese dichoso apostrofado que siempre queda más cañí), si no por la figura del muñecajo. Es un cruce entre Pumuky, un troll y un señor colocado (de drojas) con las pupilas dilatadisisísimas. Deformidad hecho plástico. Mal gusto en estado puro. ¡Y encima te regalan tres plastidecores (rojo, marrón y verde)!! Vamos, que si desean, ya saben cual regalarme. Referencia 4500 para más datos.