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martes, enero 23, 2007
8:24 p. m.

Juguetería nostálgica: el yo-yo

rubricado por Higronauta
"Mi yo-yo sube y baja cuando quiero yo"
Tonadilla infantil



El yo-yo (o yoyó) es un juguete infantil consistente en un disco de madera, plástico u otros materiales cuyo borde tiene una ranura profunda alrededor de la cual se arrolla un cordón que, anudado a un dedo y mediante sacudidas, hace subir y bajar el disco alternativamente. Este pequeño juguete diverte a los infantes los que suelen hacer artimañas con él. Actualmente, los yo-yos se adaptaron al nuevo siglo presentando diseños con formas irregulares o con luces y/o sinidos

Historia del yo-yo


Un artefacto similar al yo-yo existía ya hacia el año 1000 antes de Cristo en China, donde se utilizaba como instrumento hipnótico. Sin embargo, en su origen, el yo-yo del que deriva el juguete actual era un artilugio de caza, similar al de las boleadoras de los gauchos, que los tagalos de Filipinas llevaban usando durante más de 400 años. Eran grandes y tenían bordes cortantes y tacos y estaban atados a largas sogas. Hacia el 1800 el yo-yo llegó a Europa como una versión en forma de juguete de esta arma. Los británicos, además de yo-yo, lo denominaron "bandalore", "quiz" y "juguete del Príncipe de Gales" mientras que los franceses lo conocía como "incroyable" (increíble) o "l'emigrette". A Estados Unidos llegó en la década de 1860 pero no fue hasta la década de 1920. Pedro Flores, un inmigrante filipino, fue la primera persona que comenzó a producir yo-yos en grandes cantidades. Los juguetes de Flores llevaban el nombre de yo-yo.

En 1929, el norteamericano Donald Duncan le compró los derechos a Flores, convirtió la palabra yo-yo en una marca de mercado (®) y cambió el nudo fijo que hasta entonces conectaba el cordel con el eje por un lazo corredizo que permitía mayor versatilidad al juguete.

Fuente: Wikipedia

7 Réplicas:

Yo tuve un Russell cuando se pusieron de moda. Y sabía hacer alguna que otra cosilla. ¡Pero molaba mucho más la peonza! Lo bien que lo pasemos...

  At 24/1/07 16:37 Anonymous Anónimo afirmó:

Perdone por no responder a su pregunta sobre la versión beta pero he tenido problema en acceder a su blog desde mis links, no sé por qué.

En cuanto a la nueva versión, pues a mi me ha convencido, porque es más sencillo de manejar todo, aunque yo no tenía tan tuneada la plantilla como usted, así que no sé si le será difícil o no conservar esos cambios. Ahora, si usted maneja bien el html, no debe de resultarle laborioso, y la cuestión de ponerle etiquetas y un feed para los comentarios quizá valga la pena (a mi es lo que más me gusta)

Saludos.

  At 24/1/07 17:25 Blogger Higronauta afirmó:

Maese miultimodia, le preguntaba por varios motivos:

1. Últimamente (desconozco si es general o concreto) todo el tema con la administración y gestión con la versión "antigua" se está tornando dificultosa por problemas con blogger, sobre los cuales no puedo evitar pensar que no tienen nada de azarosos, con la mera intención de que todo quisque se mueva a la next generation

2. El tema de las etiquetas, no le negaré que sería la razón fundamental para el cambio.

Y, conocimientos de html, los justos para maquillar un poco el espacio, poco más. Aún así, entre esos conocimientos y un libro que corre por las praderas internáuticas (Publishing a blog with blogger. Visual Quickproject Guide) creo que acabaré dando el salto, más temprano que tarde. Gracias por la información.


Maese 1977, el motivo básico de este post es la reciente adquisición, via SS.MM. los reyes magos de un yo-yo, y que hace más llevadera mi cotideanidad callejera, llegando ya casi a la adicción. Y sí, la peonza era más entretenida en cuanto más social, pero entre los ataques misántropos que sufro más de en cuando que de en vez, y el hecho de no poder pararme en medio de la urbe para lanzar el susodicho juguete, ahora mismo me resulta más cómodo el yo-yo, no se si me entiende.

  At 25/1/07 02:42 Blogger sin afirmó:

jeje, yo también tuve un Russell transparente (y de 5 estrellas). Las pistolas nunca supe hacerlas pero sí el columpio. Recuerdo que a mí cole fue una vez a hacer una exhibición el Campeón del mundo. Guaauu. Al año siguiente cambié de cole y dijeron que venía el campeón del mundo por varios años consecutivos y era otro tío distinto! Luego, un día en la tele vi al campeonísimo de los campeones y, of course, era otro fulano distinto...pareciera que el yo-yo debe su nombre a ese deseo egocéntrico de autoproclamarse campeón. Me da que en los años 80 hubo unos cuantos de esos que hicieron el Agosto dando exhibiciones por colegios.

A mí también me gustaba más la peonza sobre todo porque tal como la usaban algunos entrañaba más peligro: siempre estaba ahí la posibilidad de que accidentalmente a alguien le trepanaran el craneo.

  At 25/1/07 17:47 Anonymous Anónimo afirmó:

pues yo prefiero los Tu- Tu s
la de competiciones que he organizado yo... :)

  At 28/1/07 18:35 Blogger Higronauta afirmó:

Atrás ha quedado ya aquella época en que los infantes éramos los reclamos ideales a las puertas de los colegios para la venta de cromos, peonzas, yo-yoes y demás... ¿O no?

Un servidor conocía personal que se había tuneado la peonza, cambiándole la punta por un tornillo afilado para destrozar adversarios, maese sin.

Ahí le ha dado, maese anónimo.

Pussy, de yo-yo, nop, pero de peonza y canicas, perdí ya la cuenta...