Frikis VS Freaks
"...triunfamos en la radio, en la tele y en los pubs / todos ríen nuestras gracias mientras nos forramos cantidad"
Los inhumanos, Frikis
La rabia me corroe las entrañas. Es insoportable salir a la calle y que todo el mundo tenga el vocablo “friki” en la boca. Friki como adaptación bizarrenca y cañí del término inglés freak. Analicemos el concepto: según el diccionario de la lengua inglesa, por freak se entiende a la monstruosidad, a la deformidad o a la conducta atípicamente social. Hasta aquí de acuerdo. Pero, ¿en cuántas situaciones vemos que se asocia lo freak con alguna de las definiciones arriba dadas? Casi ninguna o ninguna, a qué negarlo. Más que nada porque se ha redefinido el significante en beneficio del capital. Me explico: a una buena parte de la sociedad ibérico-profunda, sumida en un letargo perenne, les han endosado un concepto de frikismo que nada tiene que ver con su esencia, desde los medios de comunicación, mayormente. ¡Si hasta han rodado un esperpento fílmico utilizando el susodicho palabro!
No es cuestión de elitismo ni de snobismo, pero en el momento en que uno de esos elementos bizarros pasa a hacerse popularmente famoso y a vivir de ello, el Gran Hermano los engulle automáticamente. Se crea encima una sobreactuación totalmente falsa que ridiculiza (de cara a la gran galería) más aún si cabe al esperpento, con la consabida pérdida de entidad bizarra. Por si está resultando un poco confuso todo esto, pongamos ejemplos: no es lo mismo hablar de los Calatrava Bross que de Leonardo Dantés, al igual que no es lo mismo hablar de Violeta la Burra que de Carmen de Mairena. ¿Captan la diferencia? Y no es únicamente porque unos salgan en Crónicas Marcianas y los otros no. Si el freak se define por su conducta asocial, no se puede encajonar bajo este calificativo a unos elementos que gozan de reconocimiento y apoyo por parte de la masa por ser totalmente incongruente.
¿Quieren un bonito ejercicio de estilo? Cada vez que oigan la palabra friki, pregúntenle a su interlocutor si sabe que quiere decir y porqué lo dice. Antaño (y no hace tanto de ello) se usaba la frase “si está en un libro, será verdad”. Ahora, mal que nos pese a pocos, la verdad está en el tubo de rayos catódicos.
Acabemos de una vez con el frikismo y volvamos a lo bizarro y lo mostrenco. Citando a Siniestro Total "...prefiero un portaaviones a un coche de cojones porque el coche ya está ahí de por sí". O sea.
Apostilla: Buscando links e imágenes para este post he acabado más indignado si cabe: Leonardo Dantés dispone de página oficial (cosa que desconocía totalmente) y es más fácil encontrar información sobre Carmen de Mairena que sobre los Hermanos Calatrava. Una vergüenza, vamos.